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"El Zar 'chupaductos'" que Vicente Fox niega

Vicente Fox negó recientemente que en su gobierno hubiera robo de combustible, pero la historia de Martín Rojas López lo contradice

Escrito en NACIÓN el

El expresidente Vicente Fox ha negado que en su mandato, de 2000 a 2006, haya existido el robo de combustible, pero mientras gobernaba un hombre pasó de recibir un salario como chofer a percibir enormes cantidades de dinero al ser líder de Los Chupaductos, banda criminal que se dedicaba a la venta y robo de combustible.

(En ese entonces) ni siquiera existía la palabra huachicol”, declaró Fox en entrevista con Ciro Gómez Leyva en Radio Fórmula este lunes.

Sin embargo, esta aseveración se ve comprometida por un hombre: Martín Rojas López, quien fue detenido en 2005 en Houston, Estados Unidos, a los 41 años.

De acuerdo con información de la Crónica, las pérdidas por evasión de impuestos generadas por Rojas López a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), encabezada por Francisco Gil Díaz, alcanzaron más de 27 mil millones de dólares, de 1999 a julio de 2005.

De chofer a zar de Los Chupaductos

Martín Rojas López, un hombre con la cara ovalada, era un chofer seis años antes de su detención. En pocos años, logró cantidades de dinero con las que ni un capo del narcotráfico soñaría.

Las autoridades estadounidenses se enfrentaron con un serio problema cuando quisieron extraditarlo: el FBI halló que parte de su negocio ilegal lo hizo crecer en Estados Unidos, por medio del lavado de dinero.

Se detectaron cuentas bancarias, cuyas chequeras fueron emitidas en Houston, Dallas; Victoria y Brownsville, Texas; Los Ángeles, California, Nueva York y otras ciudades de Estados Unidos a nombre de Aditivos y Combustibles, S. A. de C. V.”, sentenció un reporte que la FBI otorgó entonces a la Procuraduría General de la República (PGR), encabezada entonces por Daniel Francisco Cabeza de Vaca.

Anteriormente, las autoridades mexicanas habían encontrado que en México Rojas López era dueño de depósitos clandestinos en:

-      Tihuatlán y Veracruz, Veracruz;

-      Pachuca, Hidalgo;

-      Querétaro, Querétaro;

-      Puebla, Puebla,

-      Matamoros, Tamaulipas.

Además, descubrieron que era dueño de por lo menos dos empresas donde Rójas López almacenaba gasolina que el grupo criminal robaba, y donde también adulteraba con sustancias tóxicas el combustible:

-      Aditivos y Combustibles S.A. (ACISA);

-      y Energéticos Alternos del Norte.

Pero ahí no paraba. Este hombre también fue dueño de 40 gasolineras, empresas de transporte, pavimentadoras, farmacias, hoteles e incluso casas para vestir novias.

El asesinato de un periodista

La información anterior fue descubierta y difundida por el director del diario La Opinión de Poza Rica, Veracruz: Raúl Gibb.

En abril de 2004, en Semana Santa, Gibb fue visitado en su oficina por colaboradores de Martín Rojas. Ellos le ofrecieron dinero de las ganancias por el robo de gasolina a cambio de que dejara publicar los reportajes que pusieron en evidencia sus negocios.

Dígale a Don Martín que el trabajo que realizamos en estas oficinas no está sujeto a negociación”, contestó Raúl Gibb.

Su investigación le valió el Premio Nacional de Periodismo.

El 8 de abril de 2005, el periodista fue asesinado de 15 balazos en la cabeza cuando conducía una camioneta en dicho municipio.

Tiempo despúes, la PGR señaló como el principal sospechoso del homicidio de Gibb a Rojas López.

El 2 de mayo, México fue incluido en la lista negra de los países a los que se identifican como enemigos de la libertad de prensa, por la organización internacional Reporteros Sin Fronteras.

El nombre de Martín Rojas López fue boletinado como el líder de la banda de Los Chupaductos, con la especificación de haber cometido o intentado un asesinato.

Leer también en La Silla Rota: "Tuve errores, pero combatí el huachicoleo": Calderón a AMLO

Captura en Estados Unidos

Un tipo regordete y sonriente, de mirada torcida y cabello quebrado, vestido con camisa blanca a cuadros y manga corta, así como con un pantalón negro”, así fue descrita la visión de Rojas López cuando fue bajado de la camioneta detenido.

Dos meses después del boletín, agentes del FBI, la AFI, la Interpol y de la oficina del Alguacil Federal en Houston, lograron capturarlo al salir de su casa cuando iba a realizar compras a un centro comercial.

Martín Rojas se encontraba en Estados Unidos de forma ilegal desde marzo de 2005.

Evasor de la justicia

Dos años antes de su captura, Rojas López ya había estado detenido en Veracruz, aunque sólo por dos días.

Entonces se le acusaba de defraudar al fisco por 4.3 millones de dólares, lo que era ya considerado como delito grave, el cual no alcanzaba fianza.

El juez octavo de Distrito de Tuxpan le dio una orden de libertad.

A pesar de que en un operativo a cargo de la entonces Policía Federal Preventiva (PFP), terminó con el cierre de varios de sus “negocios” las autoridades sólo lo acusaron por el fraude de 4.3 millones de pesos.

Sus argumentos eran que no había acreditado lo siguiente:

-      La propiedad de unos carros-tanque con los que se trasladaba el combustible,

-      La falta de permisos para la instalación de depósitos de carburante,

-      Y la presencia de libros no contables que registraban grandes operaciones sin reportar ganancias al fisco.

cmo