Han pasado cuatro años de que el sismo de 2017 afectó al edificio H, dentro de la Cámara de Diputados, y a la fecha no se ha concluido su rehabilitación total. Aunque el inmueble ya fue ocupado nuevamente como oficinas, en este momento prosigue la rehabilitación de su fachada para quitarle peso. No fue el único edificio afectado, pero sí fue el que más daños sufrió en comparación con los edificios A y B.
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Inicialmente se estimó que esta rehabilitación general costaría 217 millones de pesos más impuestos, pero a la fecha el Congreso ha gastado casi 500 millones y aún no han concluido los trabajos. Tan solo la rehabilitación de la fachada del edificio H esta calculada en 75 millones, de los cuales solo se ha pagado el 30%.
El diputado panista Armando Tejeda, quien hoy preside el Comité de Administración, explicó en entrevista los trabajos ya realizados. “La obra de rehabilitación del edificio H se autorizó el 4 de octubre de 2017 mediante acuerdo de la Junta de Coordinación Política y permitió la corrección de los niveles del edificio para lograr su habitabilidad a partir del 1 de septiembre de 2018, es decir al inicio de la 64 Legislatura”.
Precisó que este edificio en particular presentó un hundimiento de casi un metro, específicamente 96 centímetros. La diferencia entre éste y otro edificio que interconectan en el estacionamiento subterráneo se aprecian a simple vista; y fueron subsanadas con placas metálicas para facilitar el tránsito peatonal.
En 2017 los expertos determinaron que, a pesar del hundimiento, el edificio no tenía daños estructurales. Y se propuso colocar 192 pilotes de control para su renivelación, a una profundidad de entre 35 y 37 metros de profundidad informó Tejeda.
Explicó también que “de acuerdo con los dictámenes de seguridad estructural emitidos por el Director Responsable de Obra (DRO) y el Corresponsable en Seguridad Estructural, el edificio H fue el único inmueble de la Cámara que presentó un hundimiento súbito y se determinó como “no habitable”. Sin embargo, se recomendó intervenir el resto de los edificios A y B para controlar sus niveles de verticalidad”.
Agregó que la verticalidad se corrigió mediante su descenso controlado y el reforzamiento de su cimentación original, a fin de prevenir futuros hundimientos ante otros sismos.
Esta recomendación coincide con el criterio señalado por el Instituto de Ingeniería de la UNAM”, dijo el panista, “los pilotes de control, se hincan en lugares estratégicos cercanos a los pilotes de fricción que fueron instalados originalmente y una vez que éstos últimos se desconectan, a través de un cabezal se controla a voluntad el peso que se requiere trasmitir al pilote de control, para así lograr el movimiento del edificio, controlar hundimientos diferenciales y lograr su estabilidad. Este mecanismo es el único que puede garantizar el descenso controlado y ágil de los edificios y su verticalidad a lo largo de toda su vida útil
DUPLICARON EL GASTO
La primera asignación presupuestal para estas reparaciones fue en 2018. Se asignaron 195.5 millones de pesos para una edificación no habitacional, según datos de la Secretaría General de la cámara baja.
Pero fue hasta el presupuesto 2019 cuando se asignaron 88 millones de pesos para la rehabilitación de las celdas de cimentación.
En el presupuesto 2020 se asignaron 32 millones para mantenimiento, rehabilitación y renivelación de los edificios A, B y H. Otros 3.5 millones más para el pago de servicios de diseño, arquitectura, ingeniería y actividades relacionadas para la supervisión de la obra. Y 4 millones más para estudios estructurales.
Y en el presupuesto 2021 se asignaron más recursos. Por ejemplo, para la rehabilitación de celdas de cimentación en los 3 edificios se asignaron 45.5 millones de pesos. Más 50.5 millones para la rehabilitación de sus fachadas. Se cotizaron 2 millones para el pago de supervisión externa en las fachadas y 340 mil pesos para otra supervisión externa de las obras de renivelación.
Los 75 millones más para la rehabilitación de la fachada del edificio H no están incluidos en esta cotización, pero un documento interno así lo informó.
La suma total a este corte es de 496.4 millones de pesos. En un recorrido que realizó La Silla Rota hace unos días se trabaja aún en la rehabilitación de las fachadas.
LA PRIMERA REHABILITACIÓN
En marzo de 2018, el entonces presidente de la Cámara de Diputados, Edgar Romo, realizó un primer recorrido por las obras de rehabilitación del edificio H. Informó que los dictámenes elaborados por expertos proponían retirar los recubrimientos de cantera de éste y los otros dos edificios para aligerar su peso.
“Si hay algo que podemos presumir es que estamos rescatando San Lázaro. De no hacerlo, prácticamente se estaría en riesgo de un hundimiento o colapso de varios edificios”, dijo.
Francisco Ramos, director general de Pilotes de Control S.A. declaró en esa ocasión que el costo total de rehabilitación de los 3 edificios sería de 217 millones más impuestos y estimó concluirlo en agosto de 2020, es decir, hace un año. Cabe destacar que los 3 edificios fueron ocupados de nuevo entre 2018 y 2019.
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