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Jóvenes con discapacidad dejan su alma en una cenaduría

Los muchachos ayudan a la preparación de los alimentos de acuerdo con sus habilidades

Escrito en HIDALGO el

PACHUCA.- La cenaduría Marcos 2 tiene un aroma de salsa verde, chorizo, pollo y tortillas fritas; como cualquiera recibe clientes de las zonas aledañas, pero la diferencia es que son personas con discapacidad los encargados de servir y preparar chalupas, patitas y pambazos.

A principios de año, con recursos de la Junta General de Asistencia del DIF Hidalgo, que representan 10 por ciento de la inversión, el Proyecto de inclusión laboral se puso en marcha, con la aceptación inmediata de los consumidores, relata Blanca Díaz, titular de la organización civil con el mismo nombre, que apoya a individuos en esta condición.

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“Los muchachos me ayudan a la preparación de alimentos de acuerdo con sus habilidades. Unos pican lechuga, deshebran pechuga, otros pican los ajos, tomate o chiles y ya cuando estamos trabajando atienden las mesas, recogen los pedidos”, detalló.

Anette, Uziel y Cristian son algunos de los siete jóvenes que padecen retraso psicomotriz, microcefalia, epilepsia, parálisis cerebral o lento aprendizaje y colaboran en el negocio ubicado en la colonia El Tezontle, en calle Álamos 100, de jueves a sábado.

“El objetivo es mostrarles que pueden ser autosuficientes y realizar actividades como cualquiera de nosotros, recibir un salario para apoyar a sus familias, que haya menos discriminación. Fue motivador cuando les dimos su primer pago, unos comentaron que le ayudarían a su madre a pagar la luz. Pensamos que ellos no razonan, no piensan, no escuchan, pero son personas como todos, con sus limitaciones”, explicó.

OTRAS EXPERIENCIAS

Para concretar proyectos de inclusión laborar es indispensable que los empleadores tengan paciencia, pues permite que los jóvenes se vuelvan constantes y avancen, pues las órdenes de trabajo deben repetirse cada día para que lo lleven a cabo; por ello, Blanquita, como le dicen de cariño, considera que las madres deben liderarlos.

“Hay niños que los llevaron al Mirage, al Café Madero y solo los explotaban y no les pagaban. Incluso yo conocí a una chica que sabía leer y escribir; ella recibió el apoyo de un chef, pero cuando este se cambió de residencia llegó otro y no le tuvo la paciencia. La chica hasta este día sigue en depresión y no trabaja, entonces no sabemos, no todas las personas que están al frente de un trabajo tienen paciencia”, externó.

LA DISCAPACIDAD ES INESPERADA

En Hidalgo, 5.6 por ciento tiene alguna discapacidad. Aunque en la actualidad los servicios de salud permiten conocer de manera anticipada si un menor nacerá con una condición distinta, Blanca recuerda que no en todas las zonas rurales existen servicios adecuados o el acompañamiento para que los padres se den cuenta de que su niño es especial.

En mi caso, me dejaron pasar mi parto y mi hija sufrió una hipoxia neonatal –falta de oxígeno general o en diversos órganos– Te estoy hablando de hace 30 años, que no se conocía el tema. Mi mamá le decía al pediatra: ‘¿Por qué mi nieta no es como los otros niños?, le doy un juguete y lo tira, no lo observa’. El doctor le respondía que no todos los seres humanos iguales"

“Era su respuesta corta, pero después cuando no empieza a hablar ni caminar te encuentras ante un panorama desconocido. Anteriormente no se sabía”, expuso.

¿POR QUÉ SE LLAMA MARCOS 2?

Los versículos del 2 al 12 del libro de San Marcos en la Biblia relatan cómo Jesús sanó a un paralítico, este se enteró de su llegada y acudió cargado por cuatro hombres, pero no pudo pasar por la multitud alrededor del salvador.

La historia menciona que los sujetos subieron al techo y desde ahí bajaron al paralítico. Jesús le ordenó levantarse al ver su muestra de fe, por lo que el hombre discapacitado se puso de pie y salió andando del sitio.

HAY DISCRIMINACIÓN

De acuerdo con la Encuesta Nacional Sobre Discriminación (Enadis) 2017, 25 por ciento de mujeres y 24 por ciento de los hombres sondeados señaló que las personas con discapacidad son de poca ayuda en el trabajo.

Asimismo, 71.5 por ciento considera que quienes se encuentran en esta situación son rechazados y 58 por ciento cree que en México se respetan poco o nada los derechos de este sector.

Díaz menciona que el merendero es un ejemplo de que los obstáculos se pueden vencer y llamó a la ciudadanía a no enfocarse en los trabajos fáciles, pues es más bonito realizar las labores que otros esquivan. Por ello, a futuro espera que la cenaduría otorgue un salario más digno a los muchachos y les permita ser autosuficiente.

 

 

sjl