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Sobrepeso, lo más difícil de manipular cadáveres de covid-19

Lo más difícil para los trabajadores del panteón de Pachuca es el manejo de cadáveres de personas que fallecieron por covid-19 y que pesaban hasta 150 kilos

Escrito en HIDALGO el

PACHUCA.- Manipular cadáveres con peso de más de 100 kilos ha sido una de las complicaciones a las que se enfrentan los trabajadores del panteón municipal de Pachuca encargados de inhumar y cremar cadáveres de personas que fallecieron a causa de covid-19, narró el administrador del inmueble, Jesús Rivera Hernández.

De acuerdo con el trabajador del municipio, desde el 2 de abril hasta la última semana de junio, 86 personas que fallecieron por el virus SAR-CoV-2 han sido sepultadas o cremadas en el cementerio ubicado en el bulevar El Minero.

A partir del 27 de marzo, cuando se registraron las primeras muertes por el virus importado de Asia, estaba prohibido el traslado de cadáveres, en consecuencia, en el panteón se realizaron servicios de cremación e inhumación de personas oriundas de municipios vecinos como Tulancingo y Actopan, aunque actualmente Pachuca no recibe estos cadáveres, pues conforme avanzó la pandemia, las autoridades sanitarias permitieron el traslado de los fallecidos a sus lugares de origen, explicó el administrador.

Al paso del tiempo, nos dan la libertad que sean cremados o sepultados, dependiendo la familia, también que sean llevados a sus lugares de origen como Tulancingo, Actopan y todos los municipios aledaños, eso fue lo que ayudó a que no se haya saturado el panteón de Pachuca”, dijo.

Tras la restricción de visitas al cementerio, que determinó la administración de Yolanda Tellería Beltrán el 29 de abril y fue dado a conocer mediante un comunicado, el acceso para la celebración de un sepelio está limitado a 10 o 15 personas, siempre y cuando los deudos entren con cubrebocas o caretas.

Mientras que solo se permite el acceso a dos familiares en el caso de cremaciones de cuerpos infectados por el covid-19, las cuales tardan de 2 horas 30 minutos a 3 horas.

Los trabajadores que llevan a cabo los procedimientos de cremación e inhumación se protegen con cubrebocas, overol y guantes.

En el caso de las cremaciones, Rivera Hernández explicó que a veces es complicada la manipulación de los cuerpos, pues algunos cadáveres pesan más de 100 kilogramos y solo dos personas se encargan de todo el procedimiento.

Los cadáveres son colocados en bolsas selladas, luego son trasladados al crematorio a bordo de una camilla, posteriormente son colocados en una plancha, después ingresan al único horno con el que cuenta el panteón de Pachuca.

Algunos que han fallecido son personas con obesidad, diabetes. Nos han tocado cuerpos de 150, 160 kilos y es complicado estarlos manipulado, pero una vez que ingresa al horno, no se abre”, narró.

Al concluir cada entierro o cremación, los empleados del panteón desechan los artículos que los protegen de un posible contagio.

Hasta el momento, ningún trabajador del cementerio ha contraído el nuevo coronavirus, pese a su frecuente contacto con fallecidos por covid-19.

DATO

El panteón municipal de Pachuca reportó que de 86 personas que han fallecido a causa del covid-19, 76 fueron cremadas y 10 sepultadas.


sjl