PACHUCA.- Debido al cierre de zonas arqueológicas por la contingencia de covid-19, muchos artesanos han perdido su fuente principal de ingresos. Este es el caso de Juan Gabriel Vega, quien con más de 25 años de tradición en artesanías de piedra pulida en Tula, ahora busca otros oficios para subsistir.
Sin apoyos, y sin expectativa de reabrir a más de un año de confinamiento, la venta de artesanías ha tenido una disminución al no haber turistas, por las restricciones de movilidad que impusieron las autoridades sanitarias para evitar la transmisión del nuevo coronavirus, y personas como el artesano de Tula se quedaron sin ingresos.
Hasta el momento no hay fecha para recibir al público en la zona arqueológica de Tula, y sin apoyos de parte del gobierno, el panorama para los artesanos de la región es difícil. Para equilibrar su economía, ahora Juan Gabriel hace trabajos de instalaciones eléctricas y plomería.
No hay ni para cuando, con eso de que aquí en Tula seguimos en semáforo rojo. Tenemos que buscar alternativas. Sí nos ha afectado bastante la pandemia, porque casi no hay actividades”.
El entrevistado con LSR Hidalgo, subrayó que la crisis derivada de la pandemia se une a que las autoridades estatales y municipales no han tomado en cuenta a los artesanos para apoyarlos con medidas de rescate.
Pero eso es de antes, ahorita dicen que es por el covid, pero en 25 años que llevo en esto nunca he visto que den apoyos o algo. Esta debería ser una actividad que se apoye mucho, como las empresas que requieren inyección de capital para producir”.
Elaborar una pieza le puede llevar de dos días a dos meses, trabaja materiales como piedra, jade, serpentina, cuarzos y otros materiales con los que hace artesanías que vende a los turistas cuando visitan los Atlantes.
El escenario lo comparte con otros artesanos de la región que también tienen sus talleres en pausa por el cierre de esta zona.
No creo que llegue a desaparecer, (la actividad) porque de alguna u otra forma debe protegerse para seguir existiendo y para sacarla adelante. Lo que sí es que necesita de apoyos, esto es para que sea una actividad prospera”.
CUATRO ZONAS ARQUEOLÓGICAS
Desde el año pasado, las cuatro zonas arqueológicas de la región permanecen cerradas al público, ya que nos son actividades esenciales.
Para la celebración del equinoccio de primavera de este año, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) sugirió, a través de un comunicado, no acudir a los centros. En cambio, transmitió en vivo el equinoccio de dos centros ceremoniales.
En Hidalgo existen cuatro zonas arqueológicas: Pañhú, en Tecozautla; Xihuingo en Tepeapulco; Centro y museo de sitio Tula y Huapalcalco, en Tulancingo.
El artesano explicó que más allá de la crisis por covid, se han acostumbrado a vivir con adversidades. Espera que el gobierno atienda esta actividad económica para conservar la tradición y la cultura, debido a que, a más de un año de pandemia, su situación es cada vez más difícil.
Tenemos sangre de guerrero, podemos salir adelante”. Finalizó el entrevistado.
Fotografías: La Neta Tula, Movimiento de Afectados de la Zona Arqueológica de Tula, Turística Tula en Pinterest, @Hidalgotravel
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