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Limpieza de hogar no es responsabilidad exclusiva de mujeres

El especialista Edgar Vertty refirió que es necesario que los hombres se involucren en las tareas del hogar y que estas no sean exclusiva de las mujeres

Escrito en HIDALGO el

PACHUCA.– María Concepción Hernández Aragón, titular del Instituto Hidalguense de las Mujeres (IHM) y Edgar Vertty Rodríguez, asesor de la Red Mexicana de Masculinidades A. C., expusieron que las tareas domésticas no son distribuidas de manera equilibrada en los hogares y se delegan a las mujeres.

Ambos especialistas, participaron en el conversatorio sobre estilos de crianza al interior del hogar que organizó la asociación Servicios de Inclusión Integral y Derechos Humanos A. C. (Seiinac), para exponer las consecuencias a nivel físico, emocional y social respecto a la ejecución de quehaceres. 

Al respecto, Concepción Hernández explicó que las mujeres realizan dobles o triples jornadas laborales que implican el cuidado de la familia, responsabilidades al interior de una vivienda, además de actividades económicas fuera de casa para obtener ingresos, situaciones que resultan en un desequilibrio entre hombres y mujeres al momento de asumir las tareas domésticas.

No hay un equilibrio en la distribución de la responsabilidad de tareas domésticas y tampoco hay un equilibrio en la responsabilidad del cuidado de los hijos y las hijas, las familias de pronto están integradas por adultos mayores o personas con alguna discapacidad y ven a las mujeres como las únicas responsables de su cuidado”.

Asimismo, señaló que, dentro del núcleo familiar, los quehaceres se encomiendan a las hijas o hermanas mayores, quienes también se encargan del cuidado de los hermanos restantes.

En ese sentido, Edgar Vertty coincidió que además de que las tareas domésticas no son adecuadamente distribuidas, tampoco son valoradas, por lo que indicó que es necesario que los hombres se involucren y en general, los integrantes de un hogar al momento de ejecutar una actividad.

Tenemos muy romantizada la idea de que las mujeres deben hacer todas estas cargas laborales por amor, por amor a los hijos, a la pareja, porque es su función maternal, pero sino deconstruimos estos mitos, vamos a seguir naturalizando que es una tarea femenina, pero en realidad no es algo que le corresponda de manera exclusiva”.

CONSECUENCIAS DEL TRABAJO DOMÉSTICO

La titular del IHM puntualizó que las tareas domésticas implican esfuerzo físico que afecta la salud de las mujeres a diferencia de los hombres, quienes comparó, se desempeñan en la iniciativa pública o privada para después gozar de una pensión al llegar a una cierta edad; es decir, tienen un retiro económico, situación que no ocurre con las labores del hogar.

La mujer no va a tener esa oportunidad y va a continuar hasta que la fuerza física les permita seguir realizando las tareas domésticas”.

En el caso de quienes se emplean como trabajadoras domésticas, podrían ser explotadas laboralmente, indicó el asesor de la Red Mexicana de Masculinidades, tras argumentar que les indica que el cuidado de un hogar no se debe asumir como un trabajo, sino como una actividad inherente de las mujeres.

Quienes las contratan pueden aprovechar de la capacidad de cuidado que las mujeres tienen socialmente construida, para cargarles jornadas laborales que van más allá de las ocho horas, especialmente las personas que trabajan de planta, que viven con quien contrata sus servicios, les pagan muy poco y sus jornadas son de todo el día, se les disfraza la idea de que por ser mujeres tienen que estar preparadas para el cuidado y no asumirlo como un trabajo que se tiene que remunerar, sino como el deber ser de una mujer”.

sjl