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"La escuela me aburre": Christian de 8 años no quiere estar frente a un monitor

Después de pasar casi dos años tomando clases a través de una pantalla, Christian de ocho años perdió el interés en la escuela

Escrito en HIDALGO el

PACHUCA.- Pintor, corredor de autos, doctor, chef… el pequeño Christian de ocho años tenía interés en aprender muchos oficios y profesiones, pero luego de casi dos años de escuela virtual, lo que menos quiere saber ahora es de la escuela. Daniel, su padre habló en entrevista sobre la preocupación que tiene ante el desánimo de su hijo.

El padre de familia dijo que Christian siempre ha sido perspicaz, desde sus primeros meses era inquieto, aprendió a hablar muy rápido, en el preescolar destacaba porque hacía sus actividades muy rápido, incluso podía ayudar a sus compañeros.

Es inquieto como cualquier niño, le gusta brincar, jugar pero recientemente las clases en línea comenzaron a molestarle, se enojaba frente a la pantalla.

Un día que la maestra daba una instrucción, él quería platicar con uno de sus amigos que estaba conectado, la maestra le pidió que guardara silencio y él se enojó y apagó el monitor y se fue. Le tuvimos que explicar que cuando está en clase no puede hacer eso”.

El enojo no se ha terminado, para Daniel es evidente la frustración que tiene su hijo y la molestia que le generan las clases virtuales. Cuando sus parientes le preguntan ¿Cómo vas en la escuela?, él responde: No me gusta, me aburre.

Daniel y su esposa están preocupados, ya que tampoco las tareas le generan interés. El entrevistado detalló que hablaron con su hijo y entendieron su cansancio y su falta de motivación, así que buscaron actividades que podrían ser divertidas.

Hay ejercicios que son muy buenos para los números, para hacer experimentos, con harina, con tierra, hasta con comida, pero ya no le interesa, eso fue lo que nos puso en alerta. En los niños es natural que tengan curiosidad, pero él no la tiene, eso sí, lo que tenga que ver con juegos en las pantallas sí le gustan, pero algo de afuera, ya no”.

Él y su esposa temen que la lejanía de las escuelas y de las actividades de estos centros no hayan forjado en él un instinto por aprender o que permanecer en casa, durante tanto tiempo, lo haya desmotivado en su curiosidad y sus ganas de aprender. 

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Explicó que él conoce a muchas personas que sin educación profesional han forjado un proyecto de vida sólido; sin embargo, reconoce que la escuela brinda herramientas para enfrentar situaciones de vida, más allá de lo que tiene que ver con el conocimiento.

Le dije a mi esposa yo quiero un hijo feliz, y si quiere ser pintor de casas que lo sea, que ponga su negocio y se dedique a eso, pero que lo haga bien, que se prepare en lo que es el conocimiento, la escuela da algo más que una profesión, da valores y herramientas para vivir”.

Agregó que la escuela se ha vuelto inconstante, a veces hay clases, a veces no, y los alumnos volverán al modo presencial bajo una modalidad muy diferente, no pueden jugar como antes o interactuar como antes, los profesores hacen lo que pueden, pero pues igual ellos ya tienen sus problemas”.

Así Christian sigue en clases en línea mientras sus padres buscan que encuentre un interés, que pueda desarrollar e investigar por su cuenta.

Desde marzo del 2020, las escuelas se han quedado vacías como parte de las medidas sanitarias de la Jornada de Sana Distancia, que emprendió el gobierno federal para mitigar el nuevo coronavirus

Hasta el momento, no han abierto el 100 por ciento de las escuelas, las Secretarías de Salud y de Educación han hecho pronunciamientos sobre el incremento de casos de covid-19 para no reabrir estos espacios.

A inicios de año, la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo anunció que el 31 de enero empezarían las clases presenciales; sin embargo, no se concretó ya que muchas escuelas señalaron que esperan validación de esa dependencia.

Para permitir el acceso a la comunidad escolar, las escuelas deben presentar un protocolo en el que acrediten las medidas sanitarias y la suficiencia de infraestructura.

A las medidas que exigen las dependencias se sumó el reciente paro de labores de la sección XV del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, que inició el 3 de enero y concluyó el 31, bajo la protesta de no haber alcanzado el cumplimiento de sus pagos de bonos para jubilados y aguinaldos para personal homologado.

 

sjl