PACHUCA.- Una jauría de perros tiene en alerta a vecinos, trabajadores y estudiantes en las inmediaciones de la Escuela Secundaria General 2, pues en algunas ocasiones se avientan a los transeúntes; hasta el momento, ninguna autoridad ha tomado acción para atender el problema, aunque una agrupación protectora de animales insiste en generar campañas de esterilización.
Estos canes pernoctan en el terreno baldío de la parte trasera del centro educativo, ubicado entre las colonias Santa Julia y Constitución. Recientemente, a una vecina y su hija fueron perseguidas por los perros, quienes ya han matado gatos.
“A nosotras nos ha tocado dos ocasiones. Íbamos caminando para tomar el Tuzobús cuando de pronto se nos aventaron, uno de ellos sí iba a mordernos… afortunadamente no pasó a mayores, todo quedó en susto. Ahora, como precaución, siempre que pasamos por donde están, preferimos cruzarnos del otro lado de la calle para evitarlos”, expresó Irma Morales.
Junto con su hija, regularmente tienen que caminar por la calle 5 de Mayo para tomar el transporte público Tuzobús, en la estación Santa Julia. La vecina indicó que la jauría de perros ha crecido ya que por unas rejas de la secundaria les dejan alimento.
En entrevista con La Silla Rota Hidalgo, la ama de casa aclaró que no tiene nada contra los perritos, pues dijo ser empática con ‘los callejeritos’; sin embargo, pidió a las autoridades municipales su intervención para canalizarlos a otro espacio.
“Hace unas semanas nos enteramos que en Ajacuba una jauría de perros ‘pit bull’ mataron a una señora… estos perros que están en la general dos no son de esa raza, la mayoría son criollos, pero aún así, se corre el riesgo”, indicó.
ZONA MUY TRANSITADA: BANCOS, ESCUELA, FARMACIA Y PLAZA COMERCIAL
La zona donde deambula la jauría de perros es muy transitada ya que se ubican dos bancos, así como las instalaciones de un ‘Call Center’ donde diariamente ingresan cientos de trabajadores.
También hay una farmacia, una plaza comercial y la escuela Secundaria General 2, en la cual hace más de un mes se retomaron las clases presenciales, por lo que hay más presencia de estudiantes.
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“Ahora que regresaron los estudiantes a las aulas y con la normalización de las actividades, hay más gente que transita por la zona. Nosotros lo hemos visto, pues diariamente pasamos por ahí para nuestros trabajos”, dijo la mujer.
HACE AÑOS MAESTROS CUIDABAN Y ESTERILIZÁBAN A PERROS CALLEJEROS
Alba Luisa Jiménez del Ángel, presidenta de la agrupación La Jauría de Balú, dijo que desde hace años tienen conocimiento de la presencia de perros en la zona, quienes eran cuidados por maestros de la misma secundaria.
“Recuerdo que había maestros de la general 2 que esterilizaban a las perritas y resguardaban a los cachorros adentro de la escuela, es decir, los adoptaron de forma colectiva. Desconozco en estos momentos cómo está la situación, pero, hasta donde supe, con el cierre de la escuela por la pandemia, muchos de esos perros quedaron en la calle”, dijo en entrevista.
Es decir, los animales que cuidaban la escuela se volvieron ferales. De igual forma, se han concentrado más animales en la zona, ya que se colocó un comedor colectivo en una de las rejas de la escuela.
Lo anterior ha atraído más perros a la jauría y ha originado que entre ellos se pelen y se lastimen. De igual forma es un foco de infección para ellos, pues al comer en un solo espacio, pueden contagiarse de enfermedades.
UNA JAURÍA NO SE ACABA SACRIFICÁNDOLOS, SINO ESTERILIZÁNDOLOS
La protectora de animales dijo que la solución no es matando a los perros, sino promoviendo campañas de esterilización, tal como ocurrió con los integrantes de su asociación:
“La Jauría de Balú era 32 perros que estaban en un terreno baldío muy grande en la zona metropolitana de Pachuca. Entre ellos se peleaban, pero nosotros, como asociación, trabajamos dos años para poder esterilizar a todos y posteriormente darlos en adopción”, contó la protectora de animales.
Actualmente, dijo, de esa jauría solo quedan tres perros, los cuales están esterilizador, con collar y con un chip de seguimiento.
“Una jauría de perros no se acaba sacrificándolos, una jauría de perros se acaba esterilizándolos. También podrían aislarse a los perros que son agresivos, así se rompe la jauría”, detalló.
Este medio de comunicación buscó a las autoridades municipales de Pachuca a fin de conocer las estrategias o soluciones que podrían dar ante esta problemática. Sin embargo, no emitió postura.
Fotografías de José Antonio Alcaraz y Google Maps
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