Main logo

Exigen a gobierno de Chiapas esclarecer ejecución

El 27 de abril, policías estatales y municipales instalaron un retén en el cual tras una riña murió un joven a manos de los uniformados

Escrito en ESTADOS el

Ciudad de México.- Unos mil 600 campesinos y ganaderos del municipio costero de Pijijiapa exigieron al gobierno de Chiapas y al fiscal General del Estado (FGE), Raciel López Salazar, investigar y castigar a los policías responsables de la ejecución de un campesino la semana pasada, en una aparente riña en un retén instalado en las inmediaciones de un camino rural.

El pasado jueves 27 de abril, policías estatales y municipales instalaron un retén en el tramo de terracería que conduce de la Ranchería “San Juan” a la Ranchería “La Chincua”, en el municipio de Pijijiapan, cuando alrededor de las 14:45 horas pasó por ahí Jorge Alberto Trinidad Jiménez, quien había salido de trabajar de un rancho vecino, donde se encargaría de bañar el ganado.

Trinidad Jiménez, a bordo de su bicicleta y una mochila al hombro, se encontró con el retén de uniformados. Según la versión oficial, el policía Martín Cundapí, le hizo el alto y le dijo que le haría una revisión de rutina, a lo que el campesino supuestamente se negó en varias ocasiones.

Cuando quiso seguir su paso, elementos del mando único lo detuvieron y golpearon. Fue así que Trinidad Jiménez sacó su machete e hirió en la cabeza y en el brazo al oficial Cundapí, por lo que otro elemento, al ver la riña, sacó su arma y le disparó al campesino, quitándole así la vida a tiros de forma inmediata, indica el parte.

Ante los hechos, personal de Protección Civil, arribo al lugar y manifestaron que el policía presentaba una lesión en la cabeza y el brazo izquierdo de aproximadamente 20 centímetro provocada por arma blanca; los paramédicos trasladaron al herido al hospital básico comunitario de Pijijiapan, a bordo de la unidad PC-072, donde lo reportan grave de salud.

El asesinato indignó a la población pues argumentaron que Trinidad Jiménez no era conocido como una persona conflictiva en la región, por lo que empezaron a dudar de la versión oficial.

El domingo por la tarde, unos mil 600 campesinos de los Bienes Comunales de Pijijiapan se reunieron en asamblea en la que varias personas denunciaron los abusos de los cuerpos policiacos con sus retenes y que la muerte de Trinidad Jiménez no fue producto de una riña sino de un crimen cometido por los uniformados.

En plena asamblea habló llorando Ángela Pérez para denunciar que su esposo no era una persona violenta, por lo que la versión que dan los uniformados no es creíble ni para ella, ni su familia, ni quienes lo conocieron en vida.

Ahí mismo, el juez rural Rey Alonso Jiménez dio a conocer que él no pudo hacer sus diligencias e investigaciones, debido a que la zona donde murió Trinidad Jiménez estaba acordonado por policías estatales.

Lamentaron que el alcalde del pueblo, Aristeo Trinidad, no garantice la seguridad en su municipio como se comprometió en campaña para llegar al cargo.

Indicaron que la seguridad en el municipio ha venido a menos y que el abigeato ha crecido considerablemente, afectando así a varios productores y ganaderos de la región.

En la asamblea exigieron la intervención del gobernador Manuel Velasco Coello y del fiscal General del Estado (FGE), Raciel López Salazar. De igual forma acordaron que solicitarán una audiencia con ellos para que se investigue o se aclaren las circunstancias en los que perdiera la vida el campesino.

Con información de Proceso