PACHUCA.- Políticos como Francisco Olvera Ruiz, Gerardo Sosa Castelán, Jesús Murillo Karam, Ricardo Crespo Arroyo, Leoncio Pineda Godos, Alberto Meléndez Apodaca o Miguel Ángel Osorio Chong fueron dirigentes de su partido a nivel estatal o municipal, desde donde proyectaron una carrera política sobresaliente; sin embargo, hoy algunos desaparecieron del escenario político y otros están relacionados con procesos legales por el uso de recursos.
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Nunca antes, el tricolor pasó por una situación de crisis como la que le toca enfrentar a la actual dirigente, Érika Rodríguez Hernández, quien deberá enfrentar una elección de ayuntamientos, luego de que por primera vez su instituto político fue desplazado a la segunda fuerza en el estado por Morena, además de que podría contender sin coaliciones, pues sus viejos aliados buscaron sumarse a la agrupación de izquierda.
MIGUEL OSORIO CHONG
El 13 de febrero, Osorio se deslindó del exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex) Emilio Lozoya Austin, quien fue detenido un día antes en España acusado de recibir sobornos por más de 10 millones de pesos de la constructora brasileña Odebrecht.
Pese a que ambos integraron el gabinete de Peña –Lozoya hasta 2016–, el congresista dijo que platicó dos veces con él, además de pronunciarse para que las indagaciones salgan a la luz pública y sea castigado. El PRI nacional también emitió un comunicado en el que se deslindaba del caso.
En sus inicios, antes de convertirse en subsecretario de Gobierno en el estado e integrante del gabinete –durante los mandatos de Jesús Murillo Karam, Humberto Lugo Gil y Manuel Ángel Núñez Soto–, Osorio se desempeñó en 1995 al frente del tricolor en el estado, cuando todavía acostumbraba a obtener “carro completo” en las elecciones.
Tras encabezar el Poder Ejecutivo de Hidalgo, entre 2005 y 2011, el pachuqueño se desempeñó como secretario de Gobierno en el sexenio peñista y estuvo a un paso de ser el candidato a la presidencia de la república. Hoy es el coordinador de la bancada del Revolucionario Institucional en el Senado.
JESÚS MURILLO KARAM
El 16 de febrero se hizo público en medios de comunicación nacionales la vinculación a proceso de Judith Aracely Gómez Molano por la compra de un avión de 20 millones de dólares para el uso de Jesús Murillo Karam cuando este encabezaba la Procuraduría General de la República (PGR) en el sexenio de Peña Nieto.
La imputada se desempeñó como Oficial Mayor de la fiscalía y antes de concluir el mandato de Francisco Olvera Ruiz, recibió la patente de la Notaría 24 con sede en Pachuca, una de las 16 que fueron impugnadas con el argumento de ilegalidad en la emisión de la convocatoria y que finalmente fueron avaladas por el Juzgado Tercero de Distrito el 27 de diciembre de 2019.
El exprocurador es uno de los políticos del llamado Grupo Hidalgo que incrementó su influencia política durante el sexenio de Peña Nieto, antes había sido senador, presidente de la Cámara de Diputados y además de dirigir al PRI en el estado, a finales del siglo pasado Murillo Karam fue dos veces secretario general del PRI Nacional.
FRANCISCO OLVERA RUIZ
Desde el inicio de la actual administración excolaboradores de su administración han enfrentado procesos judiciales como José Antonio Turrubiarte, exdirector de Recursos Financieros de la Secretaría de Educación Pública de Hidalgo (SEPH), quien fue sentenciado el 24 de agosto a 10 años de prisión y al pago de 24 mil 360 pesos de multa y 126 millones 861 mil 653 pesos como “reparación del daño”, por la distracción de 44 millones 203 mil 192.45 pesos en 2014.
Otro de sus colaboradores, Pablo Pérez Vargas, exsubsecretario de Administración y Finanzas de la SEPH, permanece preso desde el 8 de noviembre de 2017 por la supuesta distracción de 68 millones 795 mil 10 pesos, 126 millones 871 mil 653 y 491 millones 267 mil 803 pesos.
Asimismo, Sergio Islas Olvera, extitular de Radio y Televisión de Hidalgo, se declaró culpable de negociaciones indebidas y fue sentenciado el 14 de diciembre de 2017 a dos años y seis meses de prisión, así como a pagar 77 millones 919 mil 52 pesos; sin embargo, huyó de la justicia.
El 30 de enero de 2018, Juan de Dios Nochebuena, exrector de la Universidad Politécnica de Francisco I. Madero (UPFIM) –nombrado por Olvera Ruiz– fue vinculado a proceso por un juez federal por presunto uso ilícito de atribuciones, pues en 2016 la institución subcontrató servicios por 185 millones de pesos que no se llevaron a cabo y que fueron entregados por la Sedatu, entonces a cargo de Rosario Robles Berlanga.
Al contrario de sus correligionarios, Olvera Ruiz dirigió los destinos del tricolor durante dos años, pero en la Ciudad de México – de diciembre de 2017 a enero de 2020–, de manera posterior a su encargo como mandatario de Hidalgo, de 2011 a 2016. En los comicios de 2018 en la capital del país, el tricolor obtuvo apenas una de las 16 alcaldías, cinco de las 66 diputaciones y 12.8 por ciento de los votos para la jefatura de Gobierno.
GERARDO SOSA CASTELÁN
El 26 de febrero próximo se cumplirá un año de que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) inició la indagación por presunto lavado de dinero y congeló a la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) primero tres cuentas con 156 millones de dólares provenientes de Suiza y después un total de 224 servicios bancarios, que incluían las cuentas personales del rector Adolfo Pontigo Loyola y el presidente del Patronato, Gerardo Sosa Castelán.
Aunque el 20 de febrero de 2018, el líder del Grupo Universidad renunció a su militancia en el tricolor, durante muchos años se sirvió del partido, que presidió de 2004 a 2006, para ser diputado federal en la LX Legislatura, además de aspirante al Senado y a la gubernatura, sin éxito.
El exrector de la UAEH también utilizó al PRI para que sus cercanos ocuparan posiciones plurinominales en el Congreso, como Ramiro Mendoza Cano. Al mismo tiempo, colocó cuadros a su hermano Damián como secretario general del PAN o a Roxana Montealegre Salvador y Lidia García Anaya en regidurías.
Posteriormente, con Movimiento Ciudadano rechazó la coalición con el PAN en 2016, pero alcanzó una curul para Miguel Ángel de la Fuente López. Actualmente, nueve diputados de Morena son afines a él en el Congreso local y tres en el federal.
LEONCIO PINEDA GODOS
El exalcalde de Tepeapulco fue nombrado dirigente del tricolor el 10 de junio de 2017 y fue el responsable de preparar las elecciones para la renovación del Congreso local, las diputaciones federales que corresponden a Hidalgo y el Senado.
Durante su gestión el tricolor sufrió la peor derrota en la historia del instituto político en el estado, pues Morena ganó 17 de 18 curules locales, los siete espacios en el Congreso de la Unión y sólo alcanzó el escaño de primera minoría en el Senado con Nuvia Mayorga Delgado.
Por primera vez, el PRI perdió el control de la Junta de Gobierno del Congreso de Hidalgo, que por la coyuntura ahora se rota de manera anual para las tres fuerzas políticas con mayor representación en el Poder Legislativo.
RICARDO CRESPO ARROYO
El 23 de febrero, Ricardo Crespo Arroyo arribó al instituto político como dirigente estatal. En 2013, en los comicios intermedios de diputados locales, el tricolor obtuvo 14 curules de manera individual y las otras 4 en alianza con el Panalh y el Partido Verde. Asimismo, en 2015, el tricolor consiguió las siete diputaciones federales
Crespo dejó la dirigencia a Alberto Meléndez Apodaca, ambos cercanos al exgobernador Francisco Olvera, con quien el primero se desempeñó como coordinador de Despacho.
Hoy, el exdirigente busca ser alcalde de Pachuca, ya sin el respaldo del instituto político, al que renunció el 15 de agosto de 2019 y que, aseguró, dejó triunfador.
ALBERTO MELÉNDEZ APODACA
El exsecretario de Planeación en la administración estatal pasada sustituyó a Crespo en 2015. Pese a que en los comicios concurrentes de 2016 el PRI ganó la gubernatura, la oposición consiguió cinco escaños de mayoría relativa y seis plurinominales.
En el caso de los municipios, el PRI perdió por primera vez Mineral de la Reforma, quedó en segundo lugar en Pachuca, refrendó Tula de Allende y recuperó Tulancingo de Bravo. Meléndez fue sustituido en 2017 y nombrado delegado federal de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), hasta la llegada de la Cuarta Transformación.
JOSÉ ANTONIO ROJO GARCÍA DE ALBA
Por casi 40 años el Grupo Huichapan, derivado de la influencia del exgobernador Jorge Rojo Lugo, ocupó los espacios prominentes de la política hidalguense; sin embargo, en la década de los 90 su presencia bajó y continuó mermada los sexenios siguientes al de Miguel Ángel Osorio Chong.
Entre 2001 y 2004, José Rojo García Alba – hijo del primero– encabezó el Comité Directivo Estatal del tricolor. Los siguientes tres años se desempeñó como presidente del Congreso de Hidalgo y también fue legislador federal de 1997 al 2000.
En 2011, buscó la postulación a la gubernatura, con el respaldo de Jesús Murillo Karam, pero la apuesta del PRI fue Francisco Olvera. En 2016, el exdiputado nuevamente fue uno de los aspirantes a abanderar al PRI en el Poder Ejecutivo, pero la candidatura finalmente recayó en Omar Fayad Meneses.
En 2018, Rojo llamó a la reconstrucción del partido, que perdió los comicios contra Morena, y ese mismo año fue nombrado delegado del CEN en Veracruz, donde coadyuvó en la organización de los comicios, sin embargo, el tricolor alcanzó apenas 3 de las 50 diputaciones postuladas y 13.96 por ciento de los votos para la gubernatura de ese estado.
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