PACHUCA.- Un Tribunal de Enjuiciamiento del Poder Judicial de Hidalgo (PJEH) absolvió a Fernando Ríos Maqueda, a quien la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJEH) acusó del homicidio de Gerardo Sosa Cravioto, asesinado a balazos el 23 de febrero de 2019.
Los jueces Jesús Anim Ope Islas, Marta Idalia Hernández Martínez y Celsa Aguilar Flores, decretaron la inmediata libertad de Fernando la madrugada de este jueves, después de que permaneció dos años recluido en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Pachuca.
Las autoridades judiciales señalaron que las pruebas que presentó el Ministerio Público fueron insuficientes para demostrar la participación de Fernando en el homicidio perpetrado en contra de Sosa Cravioto.
Es decir, Fernando no fue responsable de accionar el arma que le ocasionó a la víctima lesiones en el brazo, hombro y pecho, heridas que derivaron en una anemia aguda secundaria que pasó a laceración pulmonar y causó la muerte de Sosa Cravioto en un clínica de Tulancingo.
DELITO DE HOMICIDIO IMPUNE
La audiencia concluyó poco antes de las 3:00 de la madrugada de este jueves. Al finalizar, Baldomero Mendoza López, abogado defensor de Fernando, mencionó que el verdadero responsable aún está libre.
Está probado que desafortunadamente mataron a un joven y no sabemos quién los hizo, por lo tanto está impune".
Asimismo, indicó que se desvirtuó la acusación que en su momento la Fiscalía fabricó contra Fernando.
Hoy sabemos que nunca hubo una prueba suficiente, los cateos fueron ilegales, los reconocimientos fueron ilegales, de manera injusta estuvo Fernando recluido por un asesinato que no cometió".
De igual manera, precisó que el MP tiene la facultad de impugnar y buscar que un magistrado revise la resolución de los tres jueces.
Baldomero Mendoza agregó que será decisión de Fernando si inicia alguna acción legal contra la Procuraduría de Hidalgo.
ALEGATOS DE CLAUSURA Y FALLO
En sus alegatos de cierre, el Ministerio Público (MP) consideró que los 45 testigos que ofreció bastarían para comprobar el homicidio del que fue víctima Sosa Cravioto cuando circulaba en su camioneta sin compañía con dirección a la comunidad San José, hacia el rancho Yemila, propiedad de la familia Sosa.
Asimismo, el MP aseguró que a la altura de una zona denominada "Los Árboles", Fernando supuestamente le disparó cinco veces a Sosa Cravioto y tres tiros le impactaron en el hombro derecho, en el pecho y brazo izquierdo.
Se probó más allá de toda duda razonable que fue Fernando quien le disparó en cinco ocasiones con un arma calibre 45 que fue encontrada en su domicilio", expuso el Ministerio Público en relación al cateo.
Sin embargo, en sus alegatos, el abogado Baldomero Mendoza López expuso que la información del MP fue "pobre" y que a pesar de que aportó 45 testigos, al momento de sus alegatos, se centró en algunos.
Asimismo, cuestionó la constitucionalidad del cateo, los indicios que se encontraron en la casa, así como las pruebas periciales que derivaron de dicha diligencia; esto, al argumentar que de las 11 personas que participaron, dos agentes de investigación fueron nombrados como testigos, pero nunca entraron al cuarto donde se encontró el arma, sino que permanecieron en el zaguán del domicilio.
El material probarorio es insuficiente para una decisión condenaroria (...) Fer no lo mató, por eso pedimos su absolución", señaló el abogado ante el Tribunal.
Respecto a dichos alegatos, el Tribunal de Enjuiciamiento comenzó su resolución cerca de la una de la madrugada de este jueves y durante casi dos horas explicó los elementos por los cuales "el Ministerio Público faltó a su promesa de demostrar más allá de toda duda razonable la participación de Fernando en el homicidio".
Los jueces también señalaron que el MP debió probar su teoría del caso pero que no fueron válidos el retrato hablado, el cateo, la presunta arma homicida y los testigos.
CRONOLOGÍA DEL CASO
El 23 de febrero de 2020, Fernando fue presentado ante la jueza de control Janeth Montiel Mendoza, acusado del presunto homicidio de Gerardo Sosa Cravioto.
El hijo de Gerardo Sosa Castelán falleció el 23 febrero de 2019, después de recibir tres impactos de bala en el brazo, hombro y pecho, mientras conducía su camioneta hacia el rancho Yemila, ubicado en Acaxochitlán, Hidalgo.
Fernando fue vinculado a proceso el 28 de febrero de 2020 porque la jueza consideró que existieron “indicios razonables” de su presunta participación en el homicidio, entre ellos, una arma de fuego con la que presuntamente se cometió el ilícito.
En febrero de este año se cumplieron dos años de la vinculación a proceso de Fernando y el pasado 23 de marzo inició el juicio oral en su contra, radicado en el número de expediente 47/2021.
Del 23 de marzo al 6 de abril se desahogaron 48 testigos, de los cuales 45 los aportó la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo, entre los que figuraron agentes de investigación, peritos, familiares de la víctima como Damián Sosa Castelán, así como trabajadores del rancho Yemila, propiedad de la familia Sosa.
El 6 de abril de 2022 declaró Fernando ante los tres jueces que resolvieron su caso, también testificó su papá, su hermano y su esposa; su defensa solo pudo incorporar las tres testimoniales al juicio debido a que en la etapa intermedia la jueza de control no le admitió pruebas satelitales, de balística y retrato hablado.
(Fotos: Lorena Rosas)
El desfile probatorio concluyó el miércoles 6 de abril y el cierre de alegatos ocurrió a las 21:00 horas del mismo día.
El fallo absolutorio fue emitido la madrugada de este jueves 7 de abril, poco antes de las 3:00 de la mañana.
El próximo 13 de abril el Tribunal de Enjuiciamiento realizará la lectura de sentencia.
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