PACHUCA.- Vecinos del fraccionamiento El Palmar, ubicado al poniente de Pachuca, coincidieron en señalar que desde enero de 2020, empezó a escasear el agua.
El hídrico llega a sus casas cada tercer día, durante tres o cuatro horas; aunque en ocasiones ha pasado más de una semana sin que caiga una gota de agua.
El problema de escasez en la capital de Hidalgo y municipios conurbados es una realidad que no es ajena a la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Caasim), su titular, Abraham Rublúo, aceptó que hay un déficit y que solicitará a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) la autorización para extraer al menos 20 millones de litros más de los acuíferos subterráneos.
En entrevista con La Silla Rota Hidalgo, Jimena Hernández, dijo que desde hace 15 años que vive en El Palmar nunca había escaseado el agua como ahora; recordó que una o dos ocasiones se quedó sin agua por sequía o fuga.
Hoy darse un baño de regadera en El Palmar ya es un lujo. Antes no faltaba el agua, quizá sí, pero por alguna cuestión de la sequía o alguna fuga, pero era aislado. Nunca nos había pasado que durante varios meses y continuamente escaseara el agua”, indicó.
ESCASEZ LLEGÓ CON OBRAS
La vecina del fraccionamiento recordó que el desabasto de agua en El Palmar comenzó en enero de 2020, cuando empezaron las obras del puente vehicular en Ramón G. Bonfil, que atraviesa la Súpervía Colosio.
Incluso, hemos llegado a pasar hasta 11 días seguidos sin agua. No sabemos que haya pasado, si las redes de agua las redistribuyeron, lo ignoramos, pero curiosamente, del otro lado (de El Palmar) en la zona residencial que construyeron, que es Arboledas de San Javier, ellos no tienen problemas de agua”, denunció.
DESABASTO ACARREA PROBLEMAS Y GASTOS
Jimena Hernández vive con su pareja en un departamento que está en el tercer piso. Ambos entran a trabajar por la mañana, para apartar el agua en botes han tenido retardos en sus centros laborales, situación que es ya insostenible.
Fotografías de José Antonio Alcaraz
No hay un día en específico para que caiga el agua. Puede ser un sábado, domingo o entre semana, pero eso sí, siempre que llega es entre 7 y 10 de la mañana, o si nos va bien, cae hasta las 11. En ese tiempo se tiene que aprovechar para juntarla”, dijo.
La pareja compró un tambo de 200 litros, aparta el agua para bañarse, lavar los trastes, ropa y limpieza. Cuando la presión es baja acarrear el líquido en cubetas de una llave ubicada en la planta baja.
Como no hay agua en el tinaco, no podemos utilizar el boiler, así que en un bote de 20 litros calentamos el agua con una resistencia, sabiendo del peligro que implica. Esta agua con la que nos bañamos la reciclamos para el baño (inodoro)”, indicó.
LA POLÍTICA HÍDRICA FEDERAL
Abraham Rublúo Parra, director general de la Caasim, reconoció que debido a la falta de disposición de los mantos freáticos que están a cargo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) es que se tandea el servicio en varias partes del estado.
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La Conagua, dijo, autoriza a Hidalgo disponer de 44 millones de litros al año de los mantos freáticos que hay en el estado. Sin embargo, para poder abatir la escasez se necesitan alrededor de 20 millones de litros más.
Es un tema que debemos dejar en claro, por eso hay muchos lugares donde tenemos que mandar el agua en tandeo, es decir, tenemos que tener un control específico, muy medido a quién y cómo se le manda el agua”, dijo Rublúo Parra en una entrevista radiofónica que dio hace unos días.
Sin tener cifras exactas, el funcionario dijo que del manto acuífero de Hidalgo se abastece un 30 por ciento del agua que requiere la Ciudad de México y un 50 por ciento del Estado de México.
REQUIEREN INFORMACIÓN
Otra queja que tienen los colonos de El Palmar es que la Caasim nunca les ha informado los días en que se tandea el agua. Esto les permitiría tener una mayor organización para prever el almacenamiento del agua.
Tienen que ser conscientes, que al saber nosotros qué día y hora caerá el agua, nosotros estaríamos más prevenidos y no estaríamos a las carreras para ver si hoy caerá o no”, concluyó la vecina.
sjl