PACHUCA.- A un mes del lanzamiento de la plataforma nanosatélite NanoConnect-2 continúa en operación nominal y cumple sus objetivos técnicos, aseguró Gustavo Medina Tanco, líder del Laboratorio de Instrumentación Espacial (LINX) del Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM.
Lo anterior, da pie, adelantó Medina Tanco a comenzar los trabajos para la construcción de NanoConnect-3 "con pasos firmes para la consolidación del Laboratorio Nacional de Acceso Espacial que se instalará en Hidalgo.
“La plataforma es efectiva y funcional y por lo tanto un gran éxito para el LINX, el ICN, la Universidad Nacional Autónoma de México, el gobierno de Hidalgo y las empresas que apoyaron el proyecto como Liber Salus y Pastes Kikos”, expresó el investigador.
Hasta la fecha, la señal del NanoConnect-2 ha sido observada en más de 370 ocasiones por una centena de estaciones terrenas. La primera lectura realizada por la UNAM se dio unas horas después de orbitar, el 1 de marzo a las 17:25 horas.
Al respecto, Lamán Carranza Ramírez, titular de la Unidad de Planeación y Prospectiva, expresó que con NanoConnect-2, Hidalgo muestra su potencial en el sector espacial a todo el mundo.
Aquí en Hidalgo juntamos esfuerzos, creamos oportunidades y realidades, porque la ciencia aeroespacial no es tarea fácil, requiere de un gran esfuerzo y perseverancia, colaboraciones y negociaciones para que un proyecto sea logrado”, declaró Carranza Ramírez.
HISTÓRICO
El pasado 28 de febrero desde Hidalgo, junto con el LINX del Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM, y con los servicios de lanzamiento de ISRO (Indian Space Research Organisation) se puso en órbita el primer nanosatélite 100 por ciento mexicano, todo un hito para la ciencia aeroespacial en México, totalmente en operación y funcional a un mes de distancia.
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En México, enfatizó Carranza buscamos las oportunidades aún con presupuestos muy limitados para el sector aeroespacial que nada tienen qué ver con los de las agencias tradicionales, como por ejemplo NASA de Estados Unidos (23 mil millones de dólares anuales); Roscosmos de Rusia (3 mil 300 millones de dólares al año); ESA de Europa (6 mil 300 millones de dólares anuales) o ISRO en India (mil 400 millones de dólares anuales).
jgp