CANCÚN.- Con la ayuda de las tecnologías y con un modelo virtual, el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, rindió su Cuarto Informe de Gobierno en el que enlistó todas las acciones tomadas y presupuestos ejercidos para el combate a la pandemia por coronavirus, que afectó de manera directa la industria económica y de turismo en la entidad.
El mandatario estatal celebró su cuarto informe de gobierno desde la capital de Chetumal, con un aforo controlado y reducido e inició relatando el avance de la pandemia en Quintana Roo.
Para el gobernador desde febrero de 2020 ya tenían conocimiento de que el virus llegaría a polos turísticos, como Quintana Roo, y fue hasta el 13 de marzo cuando se confirmó el primer caso de una paciente infectada con Covid-19, fue una mujer de origen italiano que llegó a Cancún.
A partir de ese período comenzó el gobierno estatal a realizar acciones para salvaguardar la salud y vida de los quintanarroenses, refirió el mandatario estatal en su discurso, y posteriormente comenzó la contratación de trabajadores de diversas áreas médicas, paramédicos, laboratoristas y personal de salud, y se invirtió más de 400 millones de pesos para equipar el Hospital Oncológico en Chetumal, mismo que dio apoyo al municipio para atender la contingencia sanitaria.
Joaquín Gónzales dijo que durante la pandemia contrataron a 838 profesionales de salud, entre ellos, camilleros, laboratoristas, personal de primeros auxilios y actualmente se suman a los dos mil elementos de salud que existen en Quintana Roo y que trabajan combatiendo el Covid-19, además de invertirse 248 millones de pesos en insumos médicos de protección.
En cuatro meses de los periodos críticos de la pandemia se invirtieron 961 millones de pesos para incrementar la infraestructura hospitalaria y colocar 966 camas para pacientes con Covid-19 de las cuales 278 contaron con ventiladores mecánicos para pacientes graves.
Va por recuperación económica post-pandemia
El gobernador de Quintana Roo reconoció que la pandemia por coronavirus laceró de manera directa a la industria turística. Días antes del primer caso confirmado con Covid-19 en el estado se encontraban, en los diversos destinos turísticos, más de 322 mil visitantes con un 82% de ocupación hotelera.
Días después del 13 de marzo comenzó la salida masiva de turistas en el Aeropuerto Internacional de Cancún, cancelación de reservaciones de manera masiva, por lo una semana después solo quedaban alrededor de 80 mil turistas.
Ante la situación se habilitaron 15 hoteles para que pudieran ser utilizados por visitantes que por algunas situación se quedaron rezagados, además de abrirse albergues para aquellas persona que no podían pagar hospedaje.
A la par, el sector turístico y hotelero realizó protocolos de atención y capacitación para prevenir la propagación del virus y 375 hoteles emprendieron sus planes de actuación y logística para mantener los destinos turísticos del Estado como seguro.
Destacó entre estas acciones el galardón que recibió Cancún y el Caribe Mexicano en mayo de este año al ser considerado por la WTTC como un destino seguro para viajar al cumplir con los protocolos de actuación internacional para la reapertura de destinos turísticos.
El gobernador destacó en su Cuarto Informe que la deuda pública se redujo y que en 2016, cuando inició su gobierno, cada quintanarroense "debía" 15 mil 335 pesos y fue uno de sus compromisos, bajarlo, por lo que aseguró que actualmente bajó a 13 mil con siete pesos por habitante.
El 19 de marzo, el gobierno del estado lanzó el plan de emergencia “Juntos Saldremos adelante” para dar cinco apoyos para mejorar la economía familiar y apoyo alimentario. Durante los meses más críticos de la pandemia de abril a junio se otorgaron 341 mil apoyos en el consumo de agua potable, subsidios en el consumo de energía eléctrica equivalentes a 37 millones de pesos que benefició a medio millón de usuarios con bajo consumo, además de la entrega a 400 mil familias con vales de gas.
Durante su discurso el gobernador de Quintana Roo solicitó apoyo al gobierno federal para que se reconsideren los presupuestos del Fonden para ser dirigidos en la recuperación de carreteras, viviendas, espacios educativos y sistemas agropecuarios para poder abonar a la recuperación económica y turística.