Xalapa, Ver.- Arturo Benjamín Rodríguez Altamirano recién se había convertido en un agrónomo y activista que buscaba rescatar espacios de la ciudad de Xalapa “para quitarlos de las manos de los maleantes”.
El joven tenía dos meses de haberse graduado de la Facultad de Ciencias Agrícolas de Xalapa y ya había fundado el Colectivo Xalapeño de Permacultura, actividad que es considerada un sistema de diseño agrícola para generar un desarrollo sostenible.
De esta manera, con la ayuda de amigos y compañeros de la Facultad comenzó a rescatar espacios abandonados de la capital veracruzana en los que sembró huertos.
Sin embargo, el sábado pasado Arturo Benjamín fue asesinado en la Ciudad de Xalapa y su crimen prácticamente pasó inadvertido. Con él ya suman tres los agrónomos asesinatos en los últimos dos meses en Veracruz.
Apenas a finales de enero de este año el Colectivo Xalapeño de Permacultura (Coxape) había hecho su aparición pública para anunciar que buscaría rescatar espacios abandonados de la zona urbana de Xalapa.
La intención era convertirlos en huertos comunitarios demostrativos, según explicó el joven Arturo Benjamín, quien buscaba generar conciencia en actividades propias de su profesión.
Otros integrantes del Colectivo explicaron que el objetivo no era cosechar “toneladas” de alimento, pero sí cultivar plantas medicinales libre de pesticidas y agroquímicos, con el uso de la lombricomposta.
“ENTRAR A RINCONES DONDE LA SOCIEDAD NO ES APOYADA”
Con el proyecto dentro del Colectivo, Arturo Benjamín cultivaría chayote, rábanos, lechuga, acelgas, frambuesas, además de planta de ruda y romero, en sitios merodeados por la delincuencia. De hecho, el huerto de Permacultura funcionaba en la calle Prolongación Bolivia, de la colonia Benito Juárez y cualquier persona podía acceder a este, o bien para adquirir una planta o para sumarse a la siembra.
El pasado 22 de abril, dentro del Programa del Día Internacional de la Tierra, en el Parque El Haya, él mismo presentó dos temas: “Experiencia del huerto y recuperación de espacios” y “Biopreparados para el control de plagas”.
El agrónomo también participó en la logística de la Expo Sustenta 2015 en Xalapa, y por medio del Colectivo Xalapeño de Permacultura difundió acciones de sustentabilidad y el cultivo de productos orgánicos en lotes baldíos abandonados pero convertidos en huertos medicinales.
En 2018 Arturo Benjamín solicitó participar en la asignación de recursos dentro del “Programa de desarrollo integral, alimentación, inclusión social e igualdad y equidad de género en los estados” convocado por el Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol), y con estímulos de entre los 150 mil a los 300 mil pesos para los solicitantes.
El agrónomo presentó el Proyecto de Coxape y en lugar de enfatizar en sus logros personales, giró su potencial alrededor de sus compañeros del Colectivo.
“Somos un grupo de jóvenes emprendedores que nos hemos dedicado a entrar a rincones donde la sociedad no es apoyada y el rezago social es demasiado alto logrando bajar recursos por parte de distintas instituciones”, versa en la presentación entregada al Indesol.
Definió el colectivo con un enfoque a los huertos, por medio de la capacitación y la sustentabilidad a las familias.
LA CIENCIA, DE LUTO
En un posicionamiento publicado en su portal, la comunidad de la Facultad de Ciencias Agrícolas expresó su pesar por la muerte de Arturo Benjamín. “Cuando la persona muerta es un joven, duele mucho más, porque aún quedaba mucho por escribir en esa página. Cuando la persona muerta es, además de joven, asesinada violentamente, el dolor es mucho mayor” expresó el posicionamiento.
Lo anterior, luego de que en recientes sucesos egresados de dicha rama de las ciencias agrícolas sufrieron muertes violentas a manos de la delincuencia.
Son los casos de Luis Enrique Pérez Cortázar, hijo del ex funcionario de Tránsito y Transporte, Pastor Pérez Saldaña; y Víctor Ildefonso Jaime Gómez, asesinados en una terracería del municipio de San Juan Evangelista el pasado 2 de agosto. De acuerdo con las pruebas de balística, los fallecidos recibieron más de 100 disparos tras ser emboscados.
En el caso de Luis Enrique, este egresó de ingeniero agrónomo en 2017, mientras que Víctor estaba a 1 sólo crédito de graduarse.
No obstante el caso más reciente es el de Arturo Benjamín, recién graduado de la carrera.
“La muerte de ellos cuatro es una tragedia. Nuestro más sentido pésame a sus familias. Nos solidarizamos al dolor que sufren, su dolor también es nuestro” versa el posicionamiento.
Además, la UV y la comunidad de agronomía calificaron los asesinatos como una muestra más de la descomposición de la sociedad.
“No debemos acostumbrarnos a esta violencia, no debemos ver como algo normal las cosas que pasan. Como Universidad Veracruzana y como Facultad de Ciencias Agrícolas pondremos todo nuestro empeño en crear un mundo más sano, menos violento, más vivible. No queremos más hijos nuestros muertos”, concluye el posicionamiento.
ygr