MONTERREY.- Un 44.5 por ciento más que en 2015 podrán gastar los candidatos a la gubernatura de Nuevo León, es decir, hasta 72.1 millones de pesos en sus campañas.
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La Comisión Estatal Electoral acordó lo anterior en sesión extraordinaria, en la que también se determinó que los aspirantes a las alcaldías podrán gastar en conjunto 61.3 millones de pesos, un aumento de 68.6 por ciento respecto a los 36.3 millones de hace tres años.
Por lo que respecta a los candidatos a diputados, tendrán un tope, también en conjunto, de 40.9 millones de pesos, mientras que en 2018 fue de 24.2 millones.
Los criterios que siguió la CEE para establecer estas cifras fueron el equilibrio entre partidos, la inflación, los topes de la elección anterior, la cantidad de electores y secciones electorales, la densidad poblacional y la densidad de las campañas.
Otros puntos aprobados destacan lo relativo a los topes de precampaña en 20 por ciento de lo establecido en las campañas del proceso anterior, según el cargo de que se trate.
Bajo este criterio los topes para precampañas quedaron así: 9.9 millones para gobernador, 4.8 millones para diputaciones y 7.2 millones para alcaldes.
También se aprobó la acreditación de los dos partidos recién creados a nivel nacional, Redes Sociales Progresistas y Fuerza Social por México.
CRISIS ECONÓMICA
El 15 de septiembre, La Silla Rota dio a conocer que ante la crisis que registra la entidad, por los gastos extraordinarios para atender la emergencia sanitaria por la covid-19, el gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco” frenó todos los gastos de proyectos, horas extras, telefonía celular, restaurantes, difusión, contratación y basificación de personal y hasta premios de puntualidad de la burocracia.
El acuerdo se publicó en el Periódico Oficial, en el que establece que estas disposiciones estarán vigentes de septiembre a diciembre, con excepción de las áreas de salud y seguridad pública.
En el documento se establece que se cancelan nuevas contrataciones, la ocupación de plazas vacantes, la basificación del personal, premios de puntualidad, de asistencia y las horas extra.
También se suspende la contratación de toda clase de servicios profesionales, incluyendo los legales, de contabilidad, auditoría, consultoría y en tecnologías de la información, así como los arrendamientos,
De igual forma, los aguinaldos para los burócratas podrían diferirse para el próximo año, debido a la crisis económica.